21 de abril de 2013

La manada...

Me levanto de mi silla y voy al salón, él está dormido allí, en el sofá, él solo se ha debido tapar con una de las mantas que tenemos por ahí. no quiero besarlo, no quiero despertarlo. solo lo observo un segundo y me voy. 

Ahora voy a la habitación donde hay una cama en la que duerme mi perro. Está también dormido, muy dormido, hecho polvo por el día que lleva hoy de actividad, para un perro es mucho pasar el día entre perros, a pleno sol...él era feliz, pero lo acusa luego. Está K.O. Lo he besado en su bocaza grande como cien veces y ni se ha inmutado. Qué dormido está, criatura.

No sé, pero creo que no podría vivir sin este momento. Tengo a la persona y al animal que más amo en este mundo, dormidos, a mi cuidado, me siento su guardiana y su protectora, por alguna razón, al verlos dormidos, los intuyo indefensos. Y no lo están, pero quiero que lo estén. Quiero cuidarlos, el resto de mi vida, dormidos o despiertos.

Amo mi vida de guerrera protectora, porque así me siento, aunque el guerrero duerma, ella jamás descansa. Siempre estoy aquí, viva, más viva que nunca, sintiendo hasta la brisa más leve, que nos alerta, que nos augura lo bueno, lo que no es bueno.

Cuido de mi manada. Es lo que vengo a hacer en esta vida. Ahora lo sé.





12 de abril de 2013

Tontunas aparte III

Supe que no hay mujer tan segura de sí misma, ni tampoco hombre. Que no hay convicciones ni ideales de vida tan fuertes, que todo cambia, en un instante, sin darnos casi cuenta y sin poder evitarlo. 

Que nos aferramos a nuestra comodidad, a lo que nos hace sentirnos seguras, que tenemos muy claro que nunca haremos ciertas cosas, que no aguantaremos putadas de ningún jefe por un sueldo, sea mísero, sea bueno. Que no perdonaremos las faltas de nadie, aquellas que están marcadas como imperdonables, que a una pareja la aguantaremos lo justo y nada más. 

Nos quejamos de esa amiga de mierda llamada soledad, que siempre nos visita justo cuando no la hemos llamado, pero la elegimos y anteponemos a esa buena amiga que se llama humildad, la que se carga al maldito orgullo, lo hace trizas y con falsa legítima razón para hacerlo casi siempre. El orgullo pocas veces debe ganar y él muy bien sabe cuándo debe hacerlo. Pero nos obligamos a hacerlo vencer más veces, por qué ese instinto, no lo sé...

Te lleva toda una vida conocer de verdad a una persona, porque durante toda esa vida, esa misma persona se está conociendo a sí misma, incluso cambia, se transforma, mejora, empeora, te quiere más, te odia, te adora...volvemos a aferrarnos a la comodidad de cuando esa persona nos gustaba cómo era, nos convenía, nos hacía felices. No estamos muy dispuestos a transformarnos, los cambios nos cuestan tanto...sobre todo si suponen renunciar a nuestros principios, ideas, vida. Y rechazamos a esa persona porque ya no es cómo la queríamos. Y porque no queremos cambiar. 

Yo quería ser un espíritu libre, quería hacer con mi vida lo que me diera la gana, sin nadie a quien rendir cuentas, sin obligación de dar cariño, nadie con quien tener que tener detalles bonitos, a quien admirar y hacer sentir único, en fin, eso que se llama amar a alguien. Me había visto hasta en sueños toda mi vida así, no me faltaba nada para ser feliz, no necesitaba nada más que unos buenos amigos con los que hacer cosas, mis hermanas con las que hacer más cosas también, mi trabajo que me ocupaba mucho tiempo, mis viajes, mi ropa, mis gimnasios, mis peluquerías, mi música, sobre todo mi música. 

Realmente no estaba segura de cómo sentirme cuando encontré aquello que me enseñó. Tuve que aprender porque no estaba entrenada para decir en voz alta que no estaba tan segura de mí misma, que tenía miedo, que necesitaba cariño y que en el fondo, estaba deseando que alguien se acercara un poquito a mí, a mi corazón, pero de verdad. Seguro que podía ver algo dentro y yo hasta estaba dispuesta a mostrárselo. 

No sabía nada. No tenía más que un miedo atroz a moverme, no quería moverme, quería que él se moviera primero para luego yo decidir si me gustaba. Y si no, saldría corriendo enseguida, porque era lo que se debía hacer, tenía esa convicción. Las convicciones son como una acuarela, cuando las ves en la paleta no tienes muy claro de qué color van a ser...pero luego sobre el lienzo, una vez secas, lo ves todo del color que tenía que ser. No hay más. Aun así una convicción se resistía sobre todas las demás: La de no enamorarme. La de no dar nada si no había nada a cambio.

Y tras esa misma resistencia, después de esa lucha, pude ver la acuarela sobre el lienzo. Aprendí que la vida es un momento muy corto y que en él, cuanto más das, más recibes a cambio, entonces te miras en el espejo y ves que algo ha cambiado, ya no eres la misma. Y que si das y no recibes, no importa, tus convicciones ahora son de otro color, ¿no?. Estar frente a él, mirarlo fijamente y darse cuenta. No quiero que se aparte de mi vista ni un minuto más. De mi vida. 

Entonces peleas contigo misma duramente para no permitir que no se rompa esa estabilidad emocional que tantos años te ha costado lograr...Pero amiga, malas noticias. No ganas la pelea. Tu vida se vuelve patas arriba y tu cabeza y tu corazón...todo lo ves de otra forma, las canciones suenan distintas, las películas no son las mismas que viste antes, hasta el aire huele diferente. Y también lloras, lloras...porque no quieres que pase, pero sobre todo, porque ya ha pasado.

Enamorarse te hace sonreír, pero también es pánico, es tontería, es locura y es mucho enfado. Yo me enfadé mucho conmigo misma cuando me enamoré, porque no supe controlarlo, no fui capaz. Hoy he aprendido muchas cosas, después de darle tiempo al lienzo para que muestre el color real de la pintura. He aprendido que para amar, tan solo hay que querer hacerlo. Es como dejar de fumar, tan fácil como eso!! No valen las excusas de no estoy preparado, nos separan muchos kilómetros, no es buen momento, tengo un pasado, unas cargas familiares, tú no lo entiendes, dáme tiempo...Cuando se quiere amar y se encuentra a la persona a la quieres, nada ni nadie te detiene. 

Mensaje positivo del día/semana/mes (es que no sé cuándo volveré a escribir algo, jeje):

Las "creyentes" como yo, queremos que el amor sea el motor que nos mueva a tomar decisiones, a cambiar, a renunciar a convicciones idiotas y pasadas de moda, por mucho que parezcan modernas. El mundo es una mierda muy gorda, vivimos dentro pero podemos evitar el hedor y el asco que nos supone. Si te gusta alguien, si lo quieres, si lo amas, que lo sepa en este momento. Y si no quieres a nadie ni nadie te quiere ahora mismo, también es solo en este momento. Mañana puede cambiarte la vida. Te puedes enamorar y puedes enamorar.

5 de abril de 2013

Ovariando que es gerundio

- Tiene usted una invasión de quistes en su aparato reproductor, véase ovarios y aledaños.
- Oiga, doctora, pues aniquilen a los invasores ya que no puedo más con la vida. Usted no sabe lo que es esto, me duele 29 días al mes, ya ni con la regla solo, mire lo que le digo...el otro día me caí como un saco de alfalfa en el vagón del metro, línea 1, de puro dolor. Un desmayo lo tiene cualquiera, pero a las 8 de la mañana, en hora punta. En fin, que monté un numerito de circo queee...
- Me temo que no hay ya tratamiento, tenemos que operar, la cirugía es la única opción que la queda. Lo antes posible para que no se extienda más. Luego lo extraemos y analizamos el tejido, pero parece endometriosis severa, es benigno.
- A mí me da igual lo que tengo ahí, como si es una coliflor, pero quítemelo cagando leches, por favor se lo pido, ¿me pueden operar esta tarde?
- Tiene usted antes que hacerse todo el preoperatorio. En unas dos semanas quizás podríamos, depende de la lista de espera. 
Me cago en la lista de espera, ¿pues no dijo la Espe que ya no había de eso???? Bueno, al final parece que va a tener razón la tía, porque me han dado citas para el preoperatorio nada más salir, para dentro de cuatro días. Aceptable, podré sobrevivir cuatro días más con este dolor insoportable de los cojones (ovarios), quisiera yo ver a un prisionero de guerra torturado si aguantaba esto, te digo yo que lo canta todo, hasta la talla de gayumbos del coronel te canta!!!!

En cuestión de una semana, conocía aquel hospital que hasta podía recorrerme los pasillos con los   ojos entornaos, igual que en mi pisito de 35 metros cuadrados en el que vivía entonces. Yo no me hecho tanto análisis, electro, ecografía, endo-todo en mi vida más que en esa única semana, por Dios y por todo lo gordo, qué agobiazo más grande me entró, además mi dolor me acompañaba solidario a todas partes, me habré gastado medio sueldo en taxis porque no era capaz de soportar el metro ni mucho menos conducir para desplazarme de casa al hospital, del hospital al trabajo, de vuelta al hospital y otra vez al trabajo. Es lo que tiene ser gilipollas y considerar que la empresa la vas a heredar tú. Así seguimos después de tantos años y no aprendo eh...

- Jefe, que es que me tengo que operar y el médico dice que tendré que estar de baja de 6 a 8 semanas...
- ¿Cómo? ¿Qué tienes, es grave? No lo entiendo, ¿de qué te operan?
- Vamos a ver si nos entendemos, jefe: No tengo que darte explicaciones. Pero vamos, que sabes que vengo doblada a trabajar hace ya un año, no he faltado ni un día pero ya no puedo más, tengo los ovarios como dos aguacates, no puedo con la vida, no lo soporto. Vamos, ¡¡¡que tengo quistes!!! Joé que lo tengo que decir todo!!!!!
- Buah, a mi mujer la quitaron varios y en dos semanas estaba trabajando, no será para tanto...
- Pues me alegro por tu mujer alienígena, yo soy de raza humana y el plazo de recuperación me lo ha dicho la doctora, en fin, que tengo que operarme el 24 de junio, me cojo el día libre, ¿vale? Luego ya tramito la baja si eso...
- Organiza tu trabajo antes de irte, esto no puede ser- bla bla bla...cosas de jefes. Pasando...
Mi trabajo quedó por suerte bien organizado, porque no había un departamento más automatizado ni organizado que el mío, que para eso lo llevaba yo sola, como siempre...mi destino: comerme los marrones sola, pues me organizo bien sola. Así que dejé mis temas a una persona que lo tenía más fácil que jugar al parchís y me fui preparada para mi primera aventura hospitalaria propia! Qué   nervios! 

Cafetería del hospital de la Fundación Jiménez Díaz, noche antes de mi operación. Yo tomándome una cocacola light, fumándome un cigarrillo. No parece algo anormal, salvo por el hecho de que iba en pijamita, con mi bata azul, zapatillas y la pulsera de plástico que delata claramente (no el pijama por supuesto), que estoy ingresada en el susodicho centro. El camarero lo flipó mucho porque me fumé tres cigarros, pero yo pensaba "que le den morcilla, si voy a morir en quirófano, al menos moriré a gusto, disfrutando de mi vicio más querido. Y además es que ni sé a qué hora me operan".

En esto que vuelvo a la habitación y aparece una amable enfermera, que me dice que tengo que tomarme un frasco de un líquido para limpiar el estómago. -Einch??? Oiga y eso por qué??? Si yo soy muy limpia y voy muy bien al baño, esta mañana ya he cagao! - Usted tómeselo, es importante. 
Pues vale, me lo tomo, no hay problema. 
Pero es que fue echar el primer trago...y sentir el asco más grande que jamás he sentido en mi vida, aquel laxante tenía un sabor repugnante y creo que por suerte no he vuelto a probar nada parecido en mi vida. 
Fue un minuto después cuando recuerdo que me iba por la pata abajo directa al baño a soltar toda mi maldad contenida, mis nervios, mis comidas de hace mil años, restos de mis ancestros y todo aquello que estaba dentro de mis intestinos y estómago...qué cagalera por favor. Qué poderío el del líquido aquél, creo que si la Inquisición lo hubiera descubierto entonces, lo habrían usado para exorcizar a los herejes, igual alguno se habría ahorrado la hoguera...eso sí, no habría dinero en toda la Edad Media para fabricar velas aromáticas, porque no veas qué aroma.

Sintiéndome una mujer vacía toda la noche, pero literalmente y no contentos con eso, los enfermeros volvieron a la carga a primera hora de la mañana, creo que no eran ni las 7, para introducirme un enema y acabar de sacar toda la maldad de mi ser. Me quedé como el sepulcro de  Tutancamón, más vacía que otra cosa (se lo llevaron todo los ingleses). Además se pasó otro amable enfermero para rasurarme mis partes púbicas a lo bestia, yo que iba al estilo africano de entonces y me negaba rotundamente a depilarme a la brasileña. Bueno, pues a partir de esta fecha histórica, le cogí el gustillo y de los frondosos bosques nunca más se supo...

La familia aparece justo cuando tú ya estás hasta los cojones de todo y más nerviosa que nunca porque "te toca" dentro de nada. No tenía ni idea de lo que era un quirófano, ni estar tumbada en una camilla, ni llevar uno de esos pijamitas, nada de nada. Y a mí, como prueba inicial, halaaa, me iban a abrir las tripas para quitarme unos quistes en los ovarios. Joder que yo siempre tengo que hacerlo todo a lo grande o qué? Pues va a ser que sí.

Vienen unos camilleros mientras hablo con mi madre y hermanas, me dicen que me quede desnuda y me tape tumbada en la camilla. Pues vale, me despeloto toda yo y ahí estoy, tumbadita y obediente. Qué sensación de humillación, subordinación, miedo y a la vez enfado que sientes cuando te dicen eso. ¿Por qué no me operan vestida??? Bueno, en ese momento me lo pregunté, pero en realidad, recuerdo que después del enema y del frasco de laxante, ya me daba todo más igual...

- Hola Elena, pues vamos a operarla ya, vale? - Me dijo un  pedazo de tío guapísimo, con camiseta verde manga corta, gorrito verde a juego, cara y cuerpo a juego con mi vida misma...
- ¿Es usted el doctor que me va a operar?- dije yo asustada, desnuda, tumbada en una camilla y tan solo cubierta por una fina sábana verde que no me importaba en ese momento que fuera fina, lo buena que estaba yo por favor, que se veaaaaaaaaaaaa
- Sí, soy el doctor Sainz de la Cuesta, vamos a proceder, quiere decirme alguna cosa?
- Pues mire sí, una cosa: Hágame la cicatriz horizontal, por favor, que la vertical queda muy fea con el bikini y soy muy joven.
- Bueno, lo tendré en cuenta, pero depende de la gravedad hay que abrir de una forma u otra, usted está invadida por quistes, así que no le garantizo..
- Vale doctor. Pero sálveme los ovarios, por favor. Quiero tener hijos algún día. 
- Es usted muy joven, haremos cirugía conservadora, se hará lo que se pueda, pero no la garantizo nada...

Entrar a un quirófano sin saber si vas a salir con ovarios, te quita toda preocupación de si vas a salir siquiera con vida. Ni me lo planteé, cero nervios, yo quería mis ovarios y ni siquiera recuerdo mucho más. Tan solo el frío de la camilla de quirófano cuando me cambiaron desnuda desde la cama normal con ruedas, aquel doctor, el anestesista, que me dijo que pronunciara las tres cosas que más anhelaba en la vida...y me quedé en la primera, dije "vacaciones..." y me dormí.

¿Dónde estoy? ¿Todavía me están operando? Pero oigan, que se me pasado la anestesia!!!! Nooooo por favor, no me corten ahí, que dueleeeeee, joder me cago en la madre que los parió, pónganme más anestesia!!!!! Por favor dónde estoy??? Esto duele pero no tanto, quién es esta tía que me mira y sonríe???? Qué bigote tiene, uy uy uy, que me he muerto, éste es San Pedro, no es una tía!!!! Joderrrrr y ahora qué le digo???? Mamaaaaaaaaaaaaaaaa!!!!! ¿Y mis ovarios? Muertos también????? Pero qué mierda es ésta????? Soltadme cabrones, no me puedo mover!!!!!

Esto es lo que sentí cuando me desperté en la sala de reanimación tras el quirófano. Fue mi primer experiencia y aunque luego he tenido una segunda años después, aseguro que ésta no se parece en nada a cualquier cosa que haya sentido en mi vida. Mucho miedo, terror a que me abrieran en canal estando yo despierta, creyendo ellos que yo estaba dormida, mucho miedo a no despertarme jamás del todo, muchas ganas de hablar y la angustia de no poder hacerlo...

En medio de ese pavor pasaron horas, no sé cuántas, pero pasaron. Y al terminar, me vi paseada por los pasillos y me encontré con caras conocidas. Mi mami estaba ahí, así que lo poco que pude decir, más bien balbucear, fue: "¿Tengo mis ovarios?" Y la escuché decir, "sí, hija, sí, todo ha salido bien, te han salvado un ovario". 

Cuando pasas por todo esto que acabo de contar con 29 años y además, el resultado es que te quedas con un ovario solo, porque el otro estaba muy jodido y hasta el apéndice te han quitado, porque también estaba enquistado...os aseguro que ese día maduras. Es como si madurases a lo bestia, como un curso intensivo. Porque aunque no tengas ni intención de ser madre a esa edad, el instinto, el miedo, el pensar en el futuro, el no conocerte a ti misma, te bloquea de tal manera que lo único que quieres es tumbarte a llorar en una cama, además con el dolor de la cicatriz a cuestas. Pero yo no quise aceptar el llanto. Yo solo pensé que mejor un ovario que ninguno y que no pasaba nada y que además, el ovario que quedaba era el ovario más fuerte que ninguna mujer jamás tendría. No veas lo que llevaba soportado el tío. Yo amaba a mi ovario derecho y aún lo amo. Es adoración lo que tengo por él. 

Hoy tengo 40 años y mi super-ovario sigue conmigo, tras una segunda operación menos dura pero igual que la primera. En esta ocasión, lo que la ciencia y la seguridad social avanza, hay que ver...Me llaman de un día para otro, tengo cirugía, ayunas, cita en consulta llévese su ropa en mochila y la llamaremos. Joder, qué fuerte, me llaman, me pasan a una sala, con mi familia ahí conmigo...adiós ahora vuelvo...

Me desnudo, me pongo el pijamita, los patucos, el gorro y dejo mi ropa en una taquilla, como en el gimnasio. 

Ni laxantes ni edemas ni hostias en vinagre. Me siento allí en una sala y llega una enfermera majísima que me abre una vía en la mano como el que se abre una Carlsberg...yo que encima soy poco quejica y más bien tirando a valiente (o pasota según se mire), pues ni me entero. La tía dice que "da gusto gente así, no te has enterado del pedazo de agujar que te acabo de ensartar en la vena de la mano...".
-Pues que me llamen ya, yo cuanto antes, mejor.

De esa segunda operación a hoy ha pasado un año. Y mi super ovario se salvó, tuvo sus altibajos p ero sigue conmigo, funcionando como un reloj y como corresponde a cada mes. Es un máquina, un superviviente, un sufridor, un compañero. 

Espero que este mismo ovario me termine de hacer feliz y le queden óvulos suficientes como para crear otro ser humano, con los genes de su madre, no serán los mejores del mundo, claro está, pero serán míos. Y si tampoco es posible, no pasa nada, los genes de otros también molan!!

31 de marzo de 2013

En lo de ser madre y eso...

Cuando me planteé la posibilidad de ser madre, no pensé en los problemas del proceso, en la posibilidad de no conseguirlo, en la pasta que tendríamos que soltar -aunque lo he intentado por la vía pública. Solo pensé en lo que a mí me parece lo más importante: Pensé en si sería capaz de criar a un hijo, cuidarlo de bebé es lo más sencillo, de eso estoy segura, así que me refiero a todo lo demás, a partir digamos de los 14 años de la criatura. ¿Qué tal pinto yo de madre de un adolescente? ¿Seré una madre moderna e indulgente, enrollada, guay, comprensiva, educadora? ¿O seré una madre posesiva, dominadora, miedosa a la vez? Y quién narices lo sabe hasta que lo es, me dije. Pues en el proceso de preguntarme todo eso me alarmaba una preguntita nada más. ¿Y yo estoy destinada a ser madre? 

El destino. Hay quien cree a ciegas en él, en que todo está escrito y que todos estamos en este mundo con un proyecto, una labor, una vida al fin y al cabo, en concreto. Y hay quien cree que el destino es algo que te construyes tú mismo a cada decisión que tomas, con algún que otro atisbo de "destino involuntario", llámalo enfermedades, catástrofes y desamores que no has podido elegir tú mismo ni borracho perdido. 


Reconozco que no soy una de esas mujeres obsesionadas con ser madres. Ni por asomo. Sigo bebiendo cerveza, fumando más de la cuenta y aunque eso sí, mi alimentación es sanísima y lo digo con orgullo, no dejo de olvidar que lo primero y lo segundo mencionado son un obstáculo importante a mi objetivo. ¿Es realmente mi objetivo? No es el único en mi vida, por esto quizás no me lo he tomado -aún- tan en serio como para abandonar las cañitas y el tabaco...quizás por miedo a que incluso cuidándome como si fuera yo misma un recién nacido, no lo lograse. ¿Quizás busco una excusa por si no "sucede"? ¿Es el destino mi excusa? No, porque no creo en ello. Yo en lo que creo y mucho, es en la capacidad de la mente humana, ese músculo increíble que no utilizamos ni tan siquiera un 10% (http://www.xatakaciencia.com/psicologia/el-ser-humano-solo-utiliza-el-10-de-su-capacidad-mental-i).


Por supuesto, mi capacidad cerebral está en ese 10% de la media. Pero incluso en esa minúscula utilización de nuestro cerebro, somos capaces de influenciar a miles de personas y lo más importante, de motivarnos, desmotivarnos, hundirnos, levantarnos y querernos a nosotros mismos. Es fascinante. 

Como fascinante es nuestro sentido del humor. No concibo un ser humano que sea feliz sin tenerlo, creo que quien no lo posee, es un auténtico amargado, incluso para aquellas personas cuyas vidas terribles puedas entender que no es posible -y es normal- no tener ningún sentido del humor, aún creo que conservarlo te salva y te hace seguir adelante.


Y por el sentido del humor he tomado el camino, como siempre y quien me conoce lo sabe. Me parece que la empresa que estoy empezando, la de tener un hijo, está siendo más divertido de lo que podría imaginar. He leído  decálogos como éste que copio a continuación que me devuelven una sonrisa cuando la obsesión amenaza con aparecer, echando al sentido del humor de casa. Si quieres ser madre, ten claro estos puntos:




  1. Empieza a intentar tener hijos en cuanto tengas pareja. No importa que no estés preparada, en el futuro te arrepentirás.
  2. Harás cosas extrañas para quedarte embarazada, desde comer piña en exceso hasta quedarte con las piernas para arriba durante un buen rato después del sexo.
  3. Aprenderás en seguida lo que es el moco cervical y, aún más, lo incluirás muy a menudo en tu conversación.
  4. Te pondrás a llorar en los sitios más extraños cuando te venga la regla.
  5. Tu madre te empezará a enviar recortes sobre infertilidad. Sigue queriéndola, pero no los leas todos.
  6. Te pondrás celosa de todo aquel que consiga un embarazo, incluyendo un perro o una muñeca.
  7. Te dará la sensación de que todos tus contactos en facebook están embarazadas.
  8. Examinarás el papel higiénico cuando te limpies después de hacer pis como nunca habrías pensado que podrías hacerlo.
  9. Te relajarás y verás que, aún así, puedes no quedarte embarazada.

Como veréis falta el número 10 y es que parece que la autora original no lo escribió, no sé por qué. Lo voy a añadir yo, pero claro, me váis a disculpar: A mí manera.

10. Ni de coña hagas caso del punto 1 salvo que estés como una cabra. No se te ocurra intentar tener hijos con cualquier tolili que conozcas una noche de verano, porque entonces SÍ QUE TE ARREPENTIRÁS.

10.1. Da gracias que tu madre no controla internet para joderte viva con el punto 5, así que tus genes son buenos en tanto que te tuvo ya con 40 años y por tanto, es muy mayor para pilotar facebook, jeje. Lo mismo que agradecerá tu futuro hijo? Oh oh, ése ya no, porque tú pilotas!

10.2. Hacer cosas extrañas para quedarte embarazada (del punto 2): Pero vamos a ver, desde cuándo follar en cualquier sitio es una cosa extraña? Lo de las piernas para arriba, reconozco que me acordé pocas veces después, pero es que una se va al baño como si nada, mira es que tengo una obsesión que me cuelgo de la lámpara como un murciélago y ahí me quedo media hora...es una costumbre que tengo...

10.3. Sobre el punto 8. Soy una auténtica experta científica en analizar fluidos del papel higiénico. Desde mi endometriosis hasta el flujo de ovulación, creo que podría tener futuro como analista de laboratorio. Porque este blog es más bien informal, que si no escribía una tesis y hasta aportaba ilustraciones a todo color...¿Entonces tengo obsesión o no la tengo? Ummmm qué contradictorio todo...

10.4. No soy celosa, como dice el punto 6. Al contrario me alegra cuando me entero de un nuevo embarazo, aunque sea de la perra de mi vecina (es una pitbull). Lo que de veras no soporto son esas nuevas mamás que van por ahí promulgando que lo mejor que te puede pasar en la vida es ser madre, con el proceso de embarazo incluido (estrías, varices, vómitos, sobrepeso, celulitis, manchas, etc). De hecho he apartado a alguna que otra de mi vida virtual y personal, porque eran muy plastas y porque paso de seguir leyendo sus mensajes subliminales que te dicen"ser madre es ser feliz, si no lo eres suicídate, desgraciada..." "Haz click si ser madre es lo mejor del mundo...", en fin, hay tantos... Tiene que ser bonito ser madre, no me cabe duda, pero deja de comportarte como si las que no lo somos fuéramos unas amargadas infelices sin capacidad ninguna de apreciar la vida más allá de un cigoto! 

Esto lo digo ahora, que voy de listilla. Tan solo pido al cielo que si algún día lo soy, no me convierta en una de ellas y mi muro de facebook no parezca la web de "ser-padres.com", porque entonces me cierro la cuenta (suicidio virtual).

10.5. ¿Relajada? ¿Cómo dice el punto 9? Pues sí, creo que en esto sí lo estoy. Lo que ocurre es que no lo estoy en otras facetas de mi vida, véase trabajo. Mi actual puesto de trabajo, mi actual jefe, me comen la energía de tal manera que ni siquiera las clases de yoga, donde he descubierto un mundo lleno de posturas chulísimas, donde mi espalda jamás me ha agradecido lo suficiente que me apuntase y mi cabeza llena de pájarracos ha conseguido casi vaciarse alguna que otra sesión. El estrés no es amigo de los procesos de embarazo, dicen. Incluso si no estás obsesionada con quedarte embarazada, si no consigues que todo en tu vida sea tan tranquilo como el convento de las Descalzas en Toledo city, pues me parece que todo se complica. 

En nuestro estúpido intento de predecir el futuro o de anticiparnos a él, existe una faceta humana que me divierte muchísimo practicar: Imaginar con las consecuencias de uno u otro desenlace. Incluso imaginamos cuáles serán nuestras decisiones, nuestros sentimientos. Y todavía no ha pasado nada. Con esto me refiero a decidir qué harás con tu vida si la medicina decide que no vas a ser madre, entonces...¿qué viene después? Resulta que todos tus amigos, familia, familia de tu marido...etc, sabían de vuestras intenciones y ya estaba hasta su vida organizada para la llegada del nuevo retoño. Y te presentas allí el siguiente verano, ya con 41 años, sin baby, delgada, feliz, hasta guapa y sin ningún sentimiento de infelicidad en tu rostro. ¿Qué te queda por decir para que todos piensen que en realidad lo has intentado pero te daba lo mismo serlo que no, que jamás fue una obsesión o un proyecto a vida o muerte? Hay todo un abanico de argumentos a tu favor, todos igual de solidarios y políticamente correctos. Pero como yo no soy ni solidaria ni correcta, me he visualizado mil veces a mí misma diciendo la verdad y nada más que la verdad: Pues mira, no lo hemos conseguido a la primera y hemos decidido no intentarlo más, porque es una pasta y las posibilidades muy pocas. Así que vamos a vivir la vida y si eso ya adoptaremos un cachorro que también es más barato que adoptar un crío (proceso de adopción de un niño: más duro que cinco FIV juntas y más caro). 

¿E imaginar el caso contrario? Es decir, que sí viene el crío y en algunos casos con la in vitro vienen dos juntos...Lo que me he reído pensando en la cara de marido al decírselo, todo loco buscando una casa más grande, llevando al perro a un adiestrador para que no se coma a los dos mochuelillos...Me veo subiendo cuatro pisos con el tripón cargado de niños y es que me encanta. Qué dolor, qué alegría, qué espanto todo...

En la vida hay que luchar por lo que uno quiere. Primero tiene que tener claro lo que quiere, luego tiene que saber si puede conseguirlo, luego tiene que averiguar cómo conseguirlo y lo más importante: Tiene que saber qué obstáculos hay en su camino. Porque el éxito del resultado, sea cual sea, es que uno salga victorioso, con la cabeza alta y los hombros hacia atrás, decidido a seguir con el siguiente proyecto y jamás lamentándose de lo que ha hecho, ni mucho menos de lo que ha dejado de hacer. 

No dejaré de hacer lo que haga falta para ser madre. Pero si no lo consigo, tampoco dejaré de hacer lo que sea para continuar siendo feliz. Y quizás, por seleccion natural, los que nunca serán padres, están destinados a hacer otras cosas que hagan que los niños de otros, sea como sea, sean mejores. ¿Se os ha ocurrido pensarlo así?


2 de marzo de 2013

Tontunas aparte II

Bueno, pues como son tontunas "aparte", hoy lo que me apetece es hablar de cosas que me tocan mucho las narices, que acaban con mi paciencia y que me hacen sentir a veces, que vivo en un planeta de mierda por culpa de una única especie, la nuestra. No digo que vivo en un mundo de mierda, porque el mundo es el de cada uno y al menos tenemos eso: Están los mundos de Yupi, está el primer y el tercer mundo (bueno éste en concreto no lo han elegido ellos del todo, se lo hemos adjudicado entre todos los demás), también tenemos a Esther y su mundo, el mundo de la música, el mundo místico, el mundo rastafari...

Algunas de esas cosas que me queman la sangre, el orden no es prioritario, tan solo según me voy acordando:

1. Los compañeros de trabajo que intentan echarte la culpa de su mediocridad delante del jefe. Suelen coincidir también en el grupo que describo en el punto cuatro...

2. El jefe todavía más mediocre que el empleado de antes.

3. La gente que no dice la verdad sobre lo que piensa. Y la que además se piensa mucho sus mentiras. Eso es la falta de principios en toda regla. 

4. El pelota del jefe, el pelota de un compañero y el que hasta a ti te hace la pelota, para conseguir algo. Y luego a tus espaldas te pone como una burra pariendo mellizos. 

5. El típico adolescente gilipollas que va por la calle tirando latas y más basura y luego dice que le encantaría vivir en Berlín que son mucho más "cool" que nosotros. Ignorante de la vida: En Berlín nadie tira un papel al suelo y eso SÍ ES "cool". Los que no limpian la caca de sus perros en la calle. Asco de gente también. Ojalá se la hicieran comer. 

6. Los tíos -de cualquier edad- que escupen gargajos vomitivos en mitad de la calle, incluso si estás pasando por el lado en ese "íntimo" momento. Es que no lo puedo evitar, tengo que decir en voz alta y para que me oigan bien "pero qué asco de tío". Alguno me ha insultado y todo, me encanta cuando me pasa esto cuando voy con mi perro, porque entonces no se atreven a rechistar.

7. Los toreros y aficionados taurinos. Os aseguro que si tengo que ordenar esta lista, este punto va al número 1 sin más remedio. 
El otro día tengo que soportar que en las noticias de "Telecirco" anuncien como un grandísimo evento que el "Juli" (julandrón lo hubiera llamado yo), organizase una master class en una plaza para nada menos que 5000 niños!!! NIÑOS!!! Será que tienen que hacer escuela como sea porque cada vez hay menos jóvenes que quieren dedicarse a asesinar animales en público, fundidos en un traje y sombrero ridículos y no quiero olvidarme de esas medias rosa chicle que se llenan de sangre y que son lo más grotesco que he visto en mi vida después de la geta de Belén Esteban. 
Confieso que ni lo he intentado. Eso de apreciar el arte en el toreo, quiero decir. Porque llamar arte a hacer sufrir a un ser vivo, es como llamar artista a Jack el Destripador. ¿Por qué no le damos el Nobel de la Paz a Hitler, a título póstumo? ¿Qué tal a Milosevich? Ellos sí eran unos artistas en eso de matar. El "matador" dice que están solos él y el toro. Sí, claro...un toro al que han maleado a base de bien y que por su naturaleza, embiste a todo lo que se mueve de colores fuertes, como el capote rojo o rosa chicle (otra vez el puto color chicle). 

Y si hay algo que me resulta especialmente asqueroso son los picadores de toros. Esos gordos sebosos que van como cobardes que son, montados sobre un pobre caballo, con una lanza larguísima que clavan sin cesar -y con ensañamiento- sobre el lomo del animal, que no entiende nada y a veces hasta la emprende con el pobre caballo. 

En fin, no quiero seguir con este punto porque me enciendo de verdad y estoy aquí de buen rollo, relax, Elena, relax.

8. El típico empleado (entrecomillado) que no pega un palo al agua, no sabe ni hacer bien su trabajo, pero desde luego se sabe el convenio laboral de su empresa y todos sus derechos mejor que su nombre y apellidos. Y dedica su jornada laboral a proclamarlos, exigir mejoras y aleccionar, cómo no, a sus compañeros. Es su misión en la vida, que lo sepan todos. Si además es delegado sindical, ya tenemos al hombre completo, es un superman. Trabaja dos horas a la semana y cobra lo mismo que sus "camaradas", que viven bajo el yugo capitalista currando por él como cabrones las cuarenta horas como mínimo. Que viva la revolución.

9. Los conductores que se creen que el carril izquierdo, derecho y central es suyo, sobre todo porque la mayoría encima conducen un cochecillo de mierda, tuneado de mala manera, es decir, una caquita al fin y al cabo. Es que no puedo soportarlo, me pone de los nervios cuando se te pegan al trasero justo antes de llegar al atasco y encima los ves por el retrovisor, haciendo aspavientos como diciendo "aparta, tonta, que vengo yo a mil por hora". Estúpido paleto, está nevando, vamos a pararnos en diez segundos y no me sale de los ovarios apartarme para que tú te pares delante de mí y tenga que ver tu pegatina de "Penélope" todo el rato hasta mi trabajo. Punto y final.
Añado a este gremio a los camioneros que tienen la maldita manía de cambiarse para adelantar a otro camión, justo cuando vienes tú a toda velocidad. Pero qué ganas tienen algunos de salir en las estadísticas de accidentes de tráfico...

10. Los delincuentes que se ríen de todos nosotros. En este grupo podríamos incluir a TAAAAAAAAANTA gente que no sé si me da el blog para ello, pero aquí me refiero especialmente a los que cometen delitos, una y otra vez, graves, menos graves. Y siempre salen a los dos días del calabozo como si hubieran pasado el fin de semana en Benidorm de fiesta. He llegado a ver reportajes que me han puesto de tal mala leche...Salen riéndose diciendo que en este país no pasa nada, que puedes robar, matar, violar y volver a hacer todo eso, pero no te cae un puraco que te pudres toda tu vida en la cárcel. Esto es el paraíso. Que no te toque un policía ni un pelo, que a ese pobre hombre le hundes la carrera, la profesión y hasta la vida, solo por darte dos hostias bien dadas que te mereces hace mucho tiempo, desgraciao. Y me indigna mucho porque aunque sé que debería hablar de los políticos que nos roban a todos a manos llenas -y esto es lo que da para un blog entero en realidad-, me jode mucho que roben a comerciantes honrados que echan horas como cabrones para sacar adelante su pequeño negocio y a su familia. Que vuelvan y vuelvan a robarlos y que al final, esa pobre gente tenga que cerrar sus negocios por culpa de cuatro mamarrachos vagos, que han decidido como medio de vida, tomar lo que no es suyo, en lugar de trabajar o estudiar. 
No voy a discriminar, pero si encima son extranjeros, vienen de países donde por hacer eso que hacen les cortarían las manos o los huevos directamente, es que me cabreo mucho más. Aquí se ríen mientras los esposa la policía. Yo me río por no llorar. 

11. La monarquía española. Me toca mucho los cojones. Los eliminaba ya a todos directamente, que se busquen un trabajo, que cedan la Zarzuela como museo nacional, como albergue para los sin techo, la casita de los príncipes y que si quieren tener hijos como chinches que se lo curren y paguen sus facturas como todos. Verás tú cómo entonces se ponen un preservativo como Dios manda. Ya está bien de mantener gentuza que no hacer ningún servicio a esta sociedad. Ninguno. Nadie me va a convencer de lo contrario. No sirven PARA NADA. Ni siquiera en una crisis, ni en época de bonanza, no representan a nadie. Yo quiero una república democrática, no sé si funcionaremos igual de mal que ahora, pero al menos será más barato!

Ufff qué a gusto me he quedado...

Si este post hiere sensibilidades o alguien no está de acuerdo con mis opiniones, solo tengo que decir dos cosas: 1) Yo respeto 2) Pido el mismo respeto. 








28 de febrero de 2013

Alimenten mi ego. Muchas gracias.

Necesito miembros para mi blog. Stop.
No me lee ni mi marido. Stop.
Tengo solo cinco miembros y creo que me leen todos/as, pero no estoy segura. Stop.
En las estadísticas lo he flipado hoy mucho, porque veo que me leen en:
1. Kazajistán
2. Mexico
3. Indonesia
4. Francia
5. Reino Unido
6. Estados Unidos
7. Alemania (uno de mis miembros, más que probable)

Stop.

Con lo que más lo he flipado es con Kazajistán y con Indonesia...No entiendo nada, I understand nothing, guys...

Lo que digo es, que si me leéis, pasáis por aquí, entráis en mi íntima intimidad y luego no tenéis la santa decencia de:

1. Dejar un comentarito de nada
2. Agregaros como miembro para seguir alimentándoos de mis paridas

Pues que mejor ni entréis, que mi autoestima, aunque suficientemente recia como para soportar escribir un blog y ver estos resultados, no tiene necesidad de sufrir esto si tan solo os portáis bien, my friends.

En english no lo escribo, porque imagino que el de Kazajistán, que lleva un mes leyéndome, hablará español, porque si no se habrá hecho la picha un lío a estas alturas que no comprendería por qué me sigue leyendo.

Ni siquiera tengo foto, no sabéis lo feísima que soy, cohone ya. 

Stop.

Stop.

Stop.

Me voy a dormir. Hoy me tenéis hasta las narices. El mundo entero. El ser humano, digo. Salí con mi perro a correr y a él no puedo ponerle pegas, es un amor de animal. 

Pena doy, hostiasss...



22 de febrero de 2013

Tontunas aparte

Creo que estoy un poco zumbada...

De hecho, probablemente acabaré con demencia senil, Alzeihmer o cualquier otro defecto cerebral que de aquí a 30 años aparezca o se inventen los laboratorios farmaceúticos. Solo pido que me pase rápido y que no fastidie la vida de los que me rodean, a mí total, si me vuelvo gilipollas me va a dar igual...

Mira que estoy de puta madre de la vista, del oído, del olfato y de los demás órganos en general. Me acaban de dar unos resultados de una analítica completa y solo tengo colesterol del bueno, además que lo tengo para exportar, una maravilla. Me fui al endocrino preocupada por unos datos que no entendía -por hacer gasto al seguro médico privado de la empresa, que se jodan y paguen- y me echó el endocrino, andaluz él, de la consulta, haciéndome la ola y poco más o menos que me bailó "la Macarena" el tío. En sus propias palabras..."yo firmaba pa toa mi vida con este colesterol que tienes, mujer...anda con Dios y véte pa tu casa tan tranquila...".

Ese mismo día fui al dentista y me dijo que me tenía que poner una férula porque sufría de "bruxismo". Es decir, que según él, me paso las noches castañeteando los dientes y apretando como si me fuera la vida en ello. Y dije yo, ¿está seguro, doctor? Porque yo creo que no hago eso, eh. Más cabezona no la ha habido entre mi estirpe, afirmo. "Sí sí...además lo tiene bastante avanzado y cuanto antes se mentalice mucho mejor, la férula es para toda la vida, se la tiene que llevar de viaje, etc etc...". Pues vale, yo venía por dos empastes y me voy hecha una mierda...menos mal que el endocrino me ha dado un medio subidón...

Entonces me veo en el despacho del que hace los presupuestos y me suelta un papel donde dice "férula 264 euros más 37 euros cada 6 meses de revisión del aparato". Entre que sale el papelito, el colega me quiere dar palique diciéndome que si conozco "La Cabrera", un pico que hay en la sierra madrileña muy bonito, cerca de La Pedriza, donde él suele ir a tomarse unos vinos con los amigos. "Aaaah...sí...pues no sé...igual sí...". El chaval lleva unos aparatos horribles en los dientes pero tiene una guasa que no puede más, creo que por alguna razón, le he caído bien. Esto me pasa mucho, sin yo abrir la boca, la gente parece transformarse en cachondos mentales solo con mirarme (tendré cara de chiste??). Y también me pasa lo contrario. Que noto cierta aversión en personas hacia mí, con las que ni siquiera he hablado un segundo, pero si soy más maja que las pesetas... Curiosa la reacción que generas en las personas, las vibraciones que irradias según hacia quien las recibe...Yo prefiero pensar que, los zumbados como yo me entienden y de alguna forma conectan conmigo. Los que están muertos y aburridos por dentro, por supuesto no me soportan...me da la sensación de que tanta energía los agobia. La mía, digo.

Bueno  he decidido que la férula se la va a poner el doctor Amor éste donde yo le diga. Yo no tengo dinero para pagarla y si lo tuviera no me lo iba a gastar en eso, con 264 euros hago un montón de cosas. De hecho, es lo que cuestan dos billetes a Londres ida y vuelta. Y es que antes me pongo una patata cocida en la boca toda la noche para que no me chirríen lo dientes. Si la patata está mordida o directamente ha desaparecido in the morning, entonces estamos jodidos, Houston. Defcon1, pide un crédito y paga la mierda de férula ésa. Hasta ese momento, me acuesto con la patata puesta. A Dios pongo por testigo.

Tengo fe en que mi vejez -si llego- será tranquila, con sus achaques, pastilleos, algún sustillo y poco más, como mi madre más o menos. Pero que conseguiré estar en condiciones de ver la tv, ir de vacaciones a la playa y hasta coger un avión de vez en cuando. Lo de la fe ya es que después de dimitir hasta el Papa, como que cuesta, ¿sabes?, pero aun así algo queda. Fe en una misma, quizás es la única fe que vale la pena. Se me antoja muchos días díficil creer hasta en el ser humano y mira que lo intento, mira que busco señales. Pero es que somos una panda de cabrones y tenemos menos derecho a habitar este planeta que un escarabajo pelotero. Ellos se portan mejor!

Lo de que el Papa me haya desilusionado, no significa que no crea en Dios, no, no, no me he vuelto atea. Pero estoy empezando a creer más en las personas reales que me rodean, aquellas a las que quiero y me parece que me quieren, porque me hacen sentir bien hasta cuando me fallan. Al menos tengo una historia real y una explicación para dejar o no de creer. ¿Qué explicación das para decir que has dejado de creer en Dios? Pues que ya no te apetece? Que de repente ya no te crees la Biblia? No cuela. Dios no es responsable de nuestras mierdas humanas, digo yo, así que si hay que dejar de creer en alguien, es en el vecino. "Dios aprieta pero no ahoga". Qué buena la frase, le hemos prestado hace unos meses 20 euros a un vecino rumano que ni nos conocía y que, por alguna razón inexplicable, vino a pedirnos llorando el dinero para sus niños, justo a nosotros, anda que no hay pisos en el bloque (16 vecinos nada menos). Dijo que al día siguiente nos lo devolvía. Todavía estoy esperando que venga, se mudaron de piso y tú lo has visto..???. Y estuve a -27 euros aquel mes en la cuenta, pero claro, no ahogados...solo apretados...sin poder tomarnos ni una caña, coño, puñeta. Zumbados nosotros por dejarles el dinero? Quizás...

Conozco a mucha gente zumbada, de hecho, estoy rodeada de zumbados. Mis compañeros de trabajo, sin más remedio, lo están. Nos llamamos cualquier burrada ya entre nosotros porque no soportamos el hedor anti-profesional de mi propio jefe, "achicoria", "cara de culo", "pedazo de saco", "cacho de trozo", "darling bastard" y otras cosas cariñosas es lo que nos llamamos y eso cuando estamos de buen rollo. En mi familia hay mucho zumbado también, pero no voy a ser yo quien lo juzgue, estaría bueno. Mi familia es genial en esencia y el que diga que estamos locos es porque su familia es aburrida y en el fondo nos envidia muchísimo. De mis amigas zumbadas estoy más que orgullosa, no sé cuál lo está más, la diarrea mental que tenemos a veces es que me hace la mujer más feliz del mundo. Porque me hace reír tanto que me duele el estómago, esas conversaciones por whatsapp, por favor. Esas fotos que colgamos en Facebook, todas ellas candidatas a ser la carnaza del momento, siendo la ganadora aquella que tenga como mínimo 546 comentarios igual de ridículos que la misma foto.

El martes pasado me estampé contra una puerta de cristal que veía todo el mundo menos yo, llevaba un café en la mano y de la mano pasó de un salto al abrigo el puto cafelito. Monísimo quedó el abrigo, me dije. Lo de las diez personas mirándome desde el restaurante con cara de "la rubia está tonta", me parece un detalle sin importancia. Estoy acostumbrada. Como cuando voy a echar gasolina y me dejo la cartera en el coche, habiendo una cola de gente para pagar que ni en el INEM, todos con prisa a las 8 de la mañana. Y yo saliendo hacia el coche a por la cartera como si me persiguiera el Terminator, al más puro estilo Sarah Connor, corriendo por su vida. Hueles el odio en el ambiente, mmmm, hay mucho odio a las 8 de la mañana, sí...mucho.

Ya si eso sigo otro día contando tontunas. 

Se me ha ocurrido una poesía. Es penosa, pero es mía:


"Vivo en un cuerpo que es mío,
creo que es mío, 
como el aire que respiro, 
lo poseo, lo tengo y lo domino.
No sé el día que nos falta,
el cuerpo, el aire, la vida.
Dicen que queda el alma.
Quién nos habló del alma, 
si es nuestra, dónde creció,
dónde se ubica.
Mi cuerpo nació un día
cuando lo vi en tus ojos,
sentí que existía, 
que tú me veías,
y que el cuerpo ya no era mío.
Yo no sé si tengo alma, 
no sé dónde descansa,
pero donde sea que vaya,
deseo ir contigo, con tu alma.
Respirar la nada, no sentir.
Hasta eso quiero contigo."

















5 de febrero de 2013

Mi primera receta -publicada-

Bueno, sé que todos lo estábais esperando. Por fin una de mis más famosas recetas de cocina, la que me catapultó al estrellato, la que me convirtió en un icono de la cocina contemporánea...lo sé, estáis todos locos por leerla, apuntarla y hasta imprimirla para colgarla en la nevera. 

Cuando digo todos me refiero a mis cuatro lectores, que seré buena cocinera, pero una cocinera realista también soy.

Pues a ver, no pienso decir los ingredientes primero, porque eso sería poco innovador y los blogs de cocina siempre comienzan igual. Además que me voy acordando según lo escribo, el que se líe un poco que me mande un whatsapp o que se compre un libro, a mí no me pidáis explicaciones si se os quema la encimera, eh!

Bien, vamos allá.

Cogemos el coche y nos vamos al súper del barrio, el de confianza, el de toda la vida. No escojáis nada inferior que la cagáis fijo, amigos. Aparcamos en doble fila o donde podamos y rezamos unos salves para que la municipal no se pasee por allí en la próxima media hora; seguro que hay algún chorizo afanando en otra parte del pueblo, mandaría huevos que te pusieran multa a ti, ciudadana ejemplar. Correcto, ya hemos rezado y estamos dentro. Operation inmiment in 3,2,1. Go live, lieutenant O'Neil...Que entres ya cohone y te dejes de películas, tía.

Entonces elegimos los ingredientes para esta maravillosa receta que comparto con vosotros. Paseamos por toda la estancia con nuestra cestita a ruedas. Vemos las ensaladas, ummm ensalada sí, cogemos una. Al lado están las setas y los champis, ummm también, cogemos una bandejita de cada, que van muy bien para la receta. 

Ahora pasamos al ala norte, donde hay multitud de ingredientes necesarios para nuestra receta, atentos a esta zona porque es fundamental. Vemos las carnes, pollos y demás casquería todo junto pero no revuelto (menos mal que hay orden en el mundo animal). Mis respetos para los vegetarianos que jamás cruzan esta zona Defcon 2 para ellos, porque es difícil siendo que el queso, está justo a la derecha de los mismos. Jodida experiencia comprar queso si eres vegetariano, es como pasear por NY con una camiseta que diga "soy talibán, qué pasa". En fin, que vamos a elegir ingredientes y eso.

El pollo está un poco crudo, pues anda que la ternera...bueno pues cogemos una bandeja de cada. Un poco de magro, otro de ragú, unos contramuslos, en definitiva, lo necesitamos para nuestra famosa receta. A la vuelta de la esquina encontramos unos algodoncillos infantiles que no sirven para nada pero que igual está bien tener en casa, nunca se sabe. Y la caja mola un montón, cuestan solo 90 céntimos de euro.

Entramos en la zona de verdulería variada, no lo digo por esas tres marujas que a gritos le están haciendo un traje a una cuarta señora que no está presente, sino porque allí está la clave de nuestra operación. Ah! Pero antes hemos pasado por la zona de latas y nuestra cesta debe nutrirse con tomate frito, guisantes cocidos y unos espárragos para cenar otro día, qué narices. 

La verdulería es un non-stop, aquí no hay límites para el ser humano, ni vegetariano ni ovíparo ni su pajolera madre. Pimientos de todos los colores, calabacín, patatas, cebollas, ajos, zanahorias y unas mandarinas que están bien de precio. Hoy descartamos los plátanos porque tienen pinta de haberse caído al suelo 20 veces, mejor que se los coma mi amiga Rita the singer. Terminamos pasando por la zona desayunos y si no cogemos una caja de galletas es que no tenemos sangre en las venas, yo cojo dos y me quedo tan ancha. 

En esto que vamos camino a la caja, nuestro objetivo está ya cerca. Pero de camino tenemos otra importante misión: Coger una barra de pan. Parece sencillo, pero hay muchos charlies alrededor y no podemos acceder sin ser vistos. Así que optamos por la táctica de "me cuelo porque tengo el coche en doble fila" y  lo conseguimos no sin llevarnos algunos comentarios desagradables de un señor de bigote que lleva media hora esperando. La guerra es la guerra. El momento de pagar en caja lo voy a obviar, porque me da hasta vergüenza explicar con palabras nuestra jeta cuando empezamos a ver pasar la cantidad de estupideces que hemos comprado, esos algodoncillos...

Bueno y temblando voy con las bolsas camino al coche...¿hay multa, Señor, hay multa? Añade a tu coste de la compra la respuesta a esta pregunta.

Estamos en casa, tenemos todos los ingredientes de la cocina del Palace y...¿qué es lo siguiente? Elegir la receta. Aaaaaah que os creíais que era tan fácil!!! No. Hemos hecho el gilipollas en el súper como siempre, hemos comprado cuarenta cosas que no sabemos para qué usar y ahora nos toca congelar la mitad y buscar en internet qué puedo cocinar con esto, con lo otro y con lo demás allá. 

Pero tenemos una idea aquí, veamos. Cogemos el magro de pollo, esos trocitos a cuadrados que si no los cocinas pronto empieza a parecer que tienes un cadáver en la nevera...tienes los champis y las setas; bueno pues escojamos las setas que ya vienen sin tierra y no hay que lavarlas, los champis pa otro día con más ganas... Tenemos pimientos verdes y rojos, tenemos cebolla y además tenemos salsa de tomate. 

Así que vamos a freír unas patatas en una sartén y en otra vamos a echar las verduras citadas a pochar un poco; luego echamos un ajo troceado -que espero hayáis comprado por comprar- y una vez todo esto empiece a oler a algo decente, echamos el pollastre. Lo meneamos bien todo mientras nos bebemos una cervecita y nos echamos un piti -fundamental este punto para los cocineros fumadores- y tras dos pitis echamos la salsa de tomate y bajamos el fuego un poco, lo tapamos y nos podemos ir a depilar si queremos. Fíjate qué de cosas se pueden hacer mientras cocinamos, otra opción es ver el telediario o charlar por teléfono con alguna amiga, todo depende de qué noticias os apetezca escuchar más. Eso sí, no os olvidéis de las patatas que se os pueden quedar como la ceniza un puro y esto, lo sé de verdad, da mucha rabia porque pelarlas y cortarlas además de traer la bolsaca por las escaleras, es un coñazo para que luego se quemen.

En fin, ésta es mi receta de pollo con tomate, verduras y patatas. Contundente, sano y "barato". Os recomiendo coger los ingredientes y llevar la lista al súper si queréis que os salga por menos de 3 euros por cabeza. De lo contrario, acabaréis pagándolo caro.

Que aproveche...









2 de febrero de 2013

El amor y una servilleta

Pensarán muchos que por tener pareja saben lo que es el amor. Porque están casados quizás, con la persona con la que llevan más de mil años, de la que saben absolutamente todo, incluso la conocen más que a sí mismos, hasta cómo huelen cuando no se han duchado en dos, en tres, en cuatro días...Vamos, que la costra no es romántica, pero une que no veas.

Yo he vivido la mayor parte de mi vida sola, sin pareja quiero decir, pero claro, el mundo te rodea de esas felices parejas y observas desde la barrera, intuyendo las grandes cantidades de paciencia, sapiencia y aburrimiento que el estar tanto tiempo con la misma persona me parecía que había que tener. No veía el amor por ningún lado, solo veía como nexo de unión la costumbre, observaba y no veía nada más. En el restaurante se ponían a comer y diría que se comunicaban más con la servilleta que uno con el otro, patético todo, no sentía ni la más mínima envidia. Qué puto rollo de vida la de pareja, ¿no? Pues igual se quieren y todo, quién sabe...Por otra parte yo cenaba con amigas y me lo estaba pasando teta charlando sobre todo, había que pedir la vez para hablar, qué cotorras pero qué buenos ratos.

Y esto no significa que una no fuera romántica. Me encanta leer poesía, libros con historia romántica de fondo, ver películas románticas con final más o menos feliz, las canciones de amor son las más guays...en fin, amén de darle al coco imaginando a mi hombre ideal y mi vida ideal con él; que tire la primera piedra quien no lo haya hecho, por favor de la vida!  Me he visto sola en mi hipotecado nuevo piso llorando con "El diario de Noah", con "Titanic"...como si no hubiera un mañana, qué lagrimones, qué bonito, esto SÍ ES AMOR, me cago en la leche, yo quiero algo así o me quedo sola, prefiero no hundirme en el Atlántico, no obstante, que está pelín fría el agua. Ahora mismo llamo a mi hermana para salir de copas mañana porque necesito encontrar a ese hombre, dónde estará el mío, tiene que haber uno igual o mejor, si yo soy un cielo...nublado, pero cielo...¿es que ninguno lo ve???

Entre noches y más noches de copas descubrí que el hombre de mi vida no estaba en un pub a las tres de la mañana; que desde luego no era ninguno de ésos que no entendían mi sentido del humor, mi sarcasmo y hasta mi gusto por los deportes de riesgo cuando les decía cosas como "tu camisa es fea de cojones", o "eres de Líbano, ¿verdad?, oye y...¿dónde escondes el chalequito de bombas? Dios mío vamos a morir todos!". En el fondo me daba un poco igual abandonar mi soltería, no lo buscaba, pero tampoco veía que en alguna de esas noches fuera a aparecer él, casi que por eso era tan pasota, porque tenía claro que por ahí no andaban los tiros. Y te vuelves más y más dura con ellos...

Pues siendo yo un cardo borriquero, el amor lo encontré aquí, en internet. Me pilló in fraganti en una época de mi vida en la que el trabajo me estaba consumiendo, en la que lo más romántico que pasaba por mi cabeza era lavarme los dientes y lo único que me apetecía en lo que respectaba a relaciones era desaparecer. No estaba para nadie, pero por otra parte, tenía muchas ganas de hablar, de decir todo lo que tenía que decir, lo que quería. Supongo que como no tenía blog le solté a él lo que llevaba dentro y sin quererlo él descubrió mi "yo" de verdad. Lo que me dejó flipada es que no desapareció, no salió corriendo. Todo lo contrario, quiso más y más y lo mismo me sucedió a mí. Creo que él también necesitaba expresar cosas y yo era su lectora número uno, hasta poníamos los relojes en hora para charlar todos los días, cuántas horas, días, meses...

El amor no se puede explicar, muchos poetas saben adornarlo y más o meno queda una explicación hermosa. Pero si lo piensas hay claves que demuestran lo que es el amor: Cuando te importa tanto una persona que te preocupas por estar guapa, te cuidas, hasta comes mejor; pero al mismo tiempo, el pijama de franela se convierte en tu prenda más sexy, tu pelo sucio no lo ve él, solo lo ves tú que llevas dos días sin ducharte...cuando está de mala leche porque tiene hambre o está cansado, pero tú ya lo sabes así que lo ignoras y cocinas algo, o pides una pizza sin que lo sepa, para que se le pase al menos el hambre...Cuando tienes que decidir entre planchar dos blusas tuyas y dos pantalones, o tres camisetas suyas y una sola blusa y pantalón tuyos, porque odias planchar pero ya que lo haces una vez al mes, quieres que él tenga una camiseta en condiciones...Cuando estás en el supermercado y haces la compra pensando en las comidas que nos gustan a los dos, pero sobre todo a él, porque no eres machista, pero sí egocéntrica y te gusta que te diga "qué bien cocinas, cariño". Cuando llevas dos horas al teléfono con tu mejor amiga y él no te dice nada porque todos los días, a esa hora, charlas con ella, es vuestro momento. Cuando él se tira TRES horas al teléfono con sus amigos tan lejanos y hasta se pone tierno; tú le haces señas para algo pero no molestas: es su momento semanal. Pero cuando cuelga, te busca por la casa y solo te dice "te quiero...". O esas películas que os gustan a los dos y que volvéis a ver porque cada vez encontráis algo nuevo que comentar.


Suelo leer por ahí que el amor no es eterno. Pues para mí, el amor entre dos personas no lo sé, pero amar sí es eterno. Cuando has amado una vez, amas para siempre. Entonces te conviertes en amante, en alguien ya preparado para dar lo mejor que tiene el ser humano, desde luego. Quizás lo único bueno que tenemos los humanos, porque la mayoría de nuestros otros sentimientos son basura. 

Jamás quiero verme en un restaurante hablando con la servilleta: No pararemos de hablar los dos hasta que se enfríe la comida, es lo único que debe enfriarse entre nosotros. Yo no sé explicar el amor, solo sé que es el reto más difícil que se nos presenta en la vida, pero nos recuerda que estamos vivos. Todo el mundo debería vivir siempre intentándolo.























WebRep
Calificación general
Este sitio no tiene calificación
(no hay votos suficientes)

25 de enero de 2013

Experiencias paranormales: Las entrevistas de trabajo

Su entrevista es el miércoles a las 08:00 en la calle Paraíso 23, polígono industrial de a tomar por el saco. ¿Calle Paraíso? Pero si esto es el mismísimo infierno...llevo hora y media dando vueltas con el coche alrededor de unas naves poligoneras, esto está más oscuro que el sobaco de una francesa, por Dios ande me he metido...y encima esta blusa tan mona que me tira de los hijares mismos y como no la quiero arrugar parezco un Clip de Famobil conduciendo, esto es pa mear y no echar gota. Por cierto, me estoy meando. ¿Me dará tiempo de miccionar? ¿Habrá un wc en la sala de espera o pasaré otra entrevista con la vejiga a punto de explotar? A decir verdad, ésas me salen genial, lo digo todo del tirón, cuanto antes acabemos mejor, vayamos al grano que me meoooooo oiga!

Bueno, aquí estamos. Ya he localizado la puerta, me han dejado entrar y estoy esperando en la sala de espera (qué mejor sitio para esperar, ¿no?). Esta entrevista sí que sí, este puesto es para mí, de hecho cuando escribieron el perfil que buscaban, solo les faltó poner mi nombre y mi foto. Lo sé, soy la elegida, la iluminada, la number one, ole con ole qué guapa eres y ¡hostiasss! qué ojerones se te ven en ese cristal donde te acabas de reflejar. No importa, las ojeras denotan sacrificio, estudio y mucho, mucho trabajo. Y muchas horas de insomnio y mucho enganche a las series de tv de las tantas que solo los parados vemos...

Me preparé esta entrevista a conciencia, cada palabra, cada respuesta, cada posible pregunta...Con lo que no contaba era con que el que me iba a hacer la entrevista, ni se la había preparado, ni tenía puñetera idea de lo que estaba buscando. Lo mismo le digo que vengo para Director General y me contrata el muy gilipollas. Y claro, ahí los "profesionales del reclutamiento", tiran de cuestionario que no veas:

- Díme tres puntos fuertes y tres puntos débiles que tienes. 
(Joder, ya estamos con tiranteces. Y ahora qué digo...)
- Bien, sí...esto...como puntos fuertes destaco mi capacidad de trabajo, mi amplia experiencia en el sector y mis dotes de liderazgo. (amén de mis irresistibles ojos azules, mi cuerpo para el pecado y mi privilegiada voz de cantante soul). No tengo abuela, lo he dicho ya en el blog...
- ¿Y los puntos débiles?
(Cagoenla, no se le ha olvidado, así cualquiera, lo está leyendo todo)
- Pues diría que no tengo ningún punto débil destacable. Creo que me desenvuelvo bien en todos los ámbitos. Si acaso me cuesta decir que no a algún reto que me propongan, incluso si eso supone mucho más trabajo del que ya tengo. 
(Toma ya, qué bien me ha quedao, si es que soy una bestia de las entrevistas. La respuesta entre líneas es en realidad: Me la trae mucho al fresquibiri lo que estés escribiendo ahí, calvo de mierda. Si se me pegan las sábanas cada dos por tres tú crees que te lo voy a contar aquí, criatura ingenua? Anda y que te den morcilla. Pon lo que te de la gana, me tienes frita ya. Y me estoy meando hace media hora.)

- ¿Qué expectativas salariales tiene?
(A mí me han enseñado que no se dicen cifras, joder, y ahora qué hago, que yo llevo 14 años sin buscar curro...bueno va, me tiro a la swimming pool y respondo a la gallega)
- Para mí sería interesante conocer la franja salarial en la que se mueve la empresa para el puesto para poder valorarla. 
- Es que no solemos decir estas cosas en la primera entrevista.
(entonces pa qué preguntas, pedazo de ameba???)
- Bien, yo tampoco suelo, la verdad
(hala, jódete, por listo. Uy, si la que busca curro soy yo, qué sobradita vengo, por favor. Y me he meado ya en las bragas, creo). Por Dios que acabe esto...

Me he llegado a ver en una sala de espera durante más de cuarenta minutos esperando, minutos en los que he hecho todo tipo de chorradas, solo me ha faltado sacarme un moco y todo. Para darme cuenta en el último minuto de que había cámaras mirándome y que seguramente, el entrevistador y amigos se habían tirado media hora descojonándose, viéndome canturrear, atusarme el pelo, quitarme legañas, tontear con el móvil, colocarme las medias, el sujetador, quitarme los zapatos, pintarme los labios, comerme las uñas y leer mi currículum 254 veces seguidas...Me cago en la leche, esto es denunciable, igual no me dan trabajo pero les saco la pasta, por cabrones. Que yo no he venido a Gran Hermano.

En una entrevista te llegan a preguntar las cosas más inverosímiles que jamás habrías imaginado. ¿Y por qué no tiene hijos? Pero oiga, y a usted qué le importa. ¿El puesto es de logística o de madre nodriza de una nave alienígena? Amos no me jodas...La peor de todas las preguntas, aquella que te indica que debes salir corriendo de esa sala a toda leche, porque el tipo que te la está haciendo está zumbao perdido, es un Hannibal Lecter de los recursos humanos..."¿Y por qué busca usted trabajo?". Pero bueno, ¿me parezco a Paris Hilton o este tío es imbécil???? ¿Que por qué busco trabajo??? Buenas ganas me dieron de responder más de una vez: "Verá, es que tengo un rato al día, entre mi entrenador personal, mis masajes, las compras en Serrano y las dos horas al teléfono con mi amiga Pitipin...que me aburro un poco, ¿sabe? Entonces he decidido que quiero trabajar y hacer algo por mí misma..."

Lo peor de todo esto es que a veces entiendo a los entrevistadores. Porque yo también ESTUVE ALLÍ...EN EL OTRO LADO...

Tuve que entrevistar a "cienes" de personas y puedo asegurar que no es tarea fácil. Sobre todo si tu compañera de entrevistas comienza a convulsionar como una epiléptica en la silla, mientras tú tratas de explicar algo de la empresa al candidato. "¿Te pasa algo...?" "No, no, es que...se me ha encajado la silla bajo la mesa y me he quedado aquí un poquito atrapada...". "Ah bueno, sigamos, entonces". Pffffffbuaajajajajajajajajajaja. Imposible seguir una entrevista seria así...

Hay que prepararse las entrevistas. De los dos bandos, lo dije al principio. Super importante eeh! Que me he visto en una tesitura muy jodida cuando me han preguntado el salario mensual bruto y no he sido capaz de calcularlo con una hoja de excel, allí, delante del candidato que lo estaba flipando...porque mis deditos de nenuco no llegaban a las teclas y tuve que usar el codo para darle a una de las teclas. Así salió, que le calculé al chaval que iba a ganar 20 euros al mes y encima voy y se lo digo! Yo soy él y me mando a la mierda, qué paciencia y qué talante!

Tengo tantos recuerdos de tantas entrevistas, como candidata, como seleccionadora...que de verdad creo que todo eso es un mundo aparte, es como otra dimensión. Las personas lo ponemos todo en ello, queremos dar lo mejor porque creemos que valemos, porque necesitamos trabajar y porque pagan mejor o peor. Yo no creo en la suerte, creo en las ganas de uno mismo, en la preparación, en saber llevar al de enfrente, en pasar más de todo, por mucha falta que nos haga...Y en cómo tengas la vejiga de llena cuando empiece la entrevista! No veas cómo cambia tu actitud...











En busca del trabajo "pedido"

"Tiene una oferta". 
"McM & Pipermint busca gente como tú"
"Estas vacantes se ajustan a tu perfil"
"Enhorabuena. La empresa XXL te ha incluido en su proceso de selección"

...Sí, a ti y a otras 153.867 personas.

Seguro que os suenan mucho estos mensajes tan alentadores, a todos aquellos que andáis o anduvisteis buscando empleo, esto que ahora llaman encontrarse en "versión 2.0". Puñetera manía de ponerle nombrecitos modernos en la red a todo lo que hacemos...(en fin, que yo como soy muy moderna, defeco en 5.0, versión beta y me quedo tan a gusto). 

Por favor...Si estás en paro, estás en paro, las cosas por su nombre. Que no te comes una rosca, nadie te llama ni para charlar del tiempo, tu currículum nada más verlo lo usan para marcar una de 3 puntos en la papelera, en tu cuenta no entra ni un céntimo y la única "empresa" que te quiere ver es el Inem, una vez cada tres meses cuando te toca sellar...En resumen, que no somos nadie y desde luego estos mensajes engañosos solo vienen a demostrarlo. Lo mismo le envían una oferta de trabajo como Consul Honorario a un señor que busca trabajo de fresador, que a un ingeniero electrónico le llegan ofertas de "mozo de almacén turno de noche". Pero qué mierda más gorda lo de buscar trabajo, estás completamente vendida a lo que diga la red, da lo mismo lo que valgas de verdad.

Si me indigna la búsqueda de empleo en la red, el cómo mienten en las ofertas y en cómo se comunican contigo -cuando lo hacen- para informarte del estado de tu candidatura...existe una parte del proceso que me hierve la sangre: La llamadita del seleccionador o "headhunter" para hacerte una primera entrevista telefónica. Bueno, en mi año de búsqueda "activa" -atención que si no es activa no es de Danone-, me he encontrado con tantas situaciones absurdas que creo que me daría para escribir un libro entero. 

- Sí, pues la estamos llamando porque hemos visto su currículum que ha presentado para la oferta de Jefe de Logística en gran multinacional, dirigiendo a un equipo de más de 30 personas, con experiencia de más de 10 años y totalmente bilingüe en inglés...y queríamos saber si está usted interesada en el puesto. 

Vamos a ver, vamos a ver, que nos estamos fumando ya hasta la hierba del parque, amiga, debe ser por la recesión...Hija de mi vida, ¿yo para qué he enviado el currículum, pedazo de trozo? ¿Porque me aburría esa mañana???

- Sí, claro que estoy interesada. 

- ¿Y su nivel de inglés cuál es?
- Bilingüe. 
- Ah, bueno, entonces Avanzado. 
- No, no. He dicho bilingüe. 
- Nadie es bilingüe, solo los nativos. 
- ¿Los nativos de dónde? 
- En fin, déjelo, señorita.
- Señora, soy señora. 

- Bueno, pues para este puesto la empresa ofrece 17000 € anuales en jornada de lunes a sábados. 
- ¿Para jefe de logística? Pero si ese salario es el mínimo para un auxiliar administrativo, perdóneme.
- Ya, pero es lo que hay ahora mismo, hay que adaptarse al mercado. ¿Le interesa o no?
- No. No me interesa ser responsable de 30 personas, trabajando 12 horas diarias por 800 euros al mes, con un Director cabrón por encima todo el día pidiéndome resultados y poniéndome objetivos inalcanzables para un ser humano. Sin son tan amables, en próximas ofertas similares publiquen el salario en la web. Así ahorramos tiempo todos. 

En mi año de búsqueda he pasado por varias fases: La fase de disparo con metralleta. En ésta mandas currículums para cualquier cosa, sin control, solo porque te hace ilusión que te llamen o al menos que te pongan "en proceso". La fase de profesionalización de una misma. Empiezas a participar en foros de la red, te apuntas a grupos y hasta acudes a eventos en hoteles chulísimos para tomar un vino y repartir tus cutre-tarjetas a diestro y siniestro, lo que supone aguantar durante una hora a algún viejo petardo que dice ser vicepresidente de no sé qué multinacional (pero qué casualidad, se ha quedado sin tarjetas el desgraciao). En esta fase también me apunté a eventos donde te enseñaban a buscar trabajo, a crearte tu "personal branding" o marca personal, a creértelo como nadie, vamos. A saber venderte al mejor postor como si fueras un zorrón verbenero de la casa de campo, solo que vendes otra cosa y con más clase y acierto. No estaban mal, además repartías más tarjetitas (coño que las tenía que dar salida, me costaron 10 euros 100 tarjetas!!!).

Luego llega una fase que es la que yo llamaría la fase francotirador. Ya no envías candidaturas a to quisqui, ya apuntas a lo que realmente quieres. Y esto es porque tras pasar muchas, pero muchas entrevistas, y muchas, muchas horas en casa pensando, echando la vista atrás...te has dado cuenta de lo que realmente quieres. Y de lo que realmente sabes seguro que puedes ofrecer, aquello que sabes hacer mejor que nadie. Averiguar esto es muy jodido, de verdad que lo es. Porque perder un trabajo y quedarse en casa, tras 14 años trabajando como una bestia sin parar, te deja hecha caca. Empiezas a pensar, sin poder de veras evitarlo, que no vales para nada, que te lo mereces, que esto es tu destino y que no vas a mejorar sino que esto solo es el principio de un trabajo mucho peor, encima si te ocurre en medio de la crisis que vive este nuestro querido país bananero.

Cuando por fin has descubierto eso tan importante, milagrosamente empiezas a recibir respuestas. Las empresas se empiezan a interesar, tu currículum ha cambiado porque TÚ lo has cambiado. 

Entonces viene la fase de entrevistas a lo loco. Es que no tienes ya ni ropa limpia para acudir a una y a otra, así que repites modelito de la suerte jeje, siempre te pones la misma ropa, qué narices, no estamos para trajecitos nuevos, la prestación no da para más! 

Próximo capítulo: Experiencias paranormales en entrevistas de trabajo.

Os dejo con mi amigo James Hetfield y su "Nothing else matters". Una de mis muchas canciones favoritas. 

Porque nada más importa que tú mismo.